El 24 de octubre, aprovechando que es el Día de la Biblioteca, se inaugura la Biblioteca de Semillas: Ese día empieza el préstamo y se hace el primer taller en la localidad de Bustares.
¿ Qué son las bibliotecas de semillas ?
Las bibliotecas públicas son lugares de encuentro en los que surgen ideas que germinan dando frutos de un valor incalculable, como ha sido el caso de este proyecto en colaboración con la Huerta Ecolenta. Una idea que nos conecta con dos de los objetivos de la Agenda 2030.
El Objetivo 11.4 que pretende "Redoblar los esfuerzos para proteger y salvaguardar el patrimonio cultural y natural del mundo" y la meta 2.5, que consiste en promover el acceso y la distribución justa y equitativa a la diversidad genética de las semillas, incluida en el Objetivo 2 que persigue el "Hambre cero y seguridad alimentaria".
Es un servicio de préstamo de semillas, alojado en las instalaciones de la biblioteca pública. La biblioteca, además de prestar libros y demás documentos, presta semillas. El usuario/a que recibe las semillas se compromete a sembrarlas y, si todo va bien y dan frutos, devolverlas para que otros usuarios puedan hacer lo mismo. A la vez, se invita a los usuarios que tengan semillas locales a traerlas a la biblioteca para ocuparnos de multiplicarlas y compartirlas.
Es un proyecto circular. Pero no somos un banco de semillas. Esta labor la hacen y muy bien en los Centros de Recursos Fitogenéticos nacionales.
La función de la biblioteca de semillas es concienciar del enorme valor de la semilla; difundir, multiplicar, recuperar e intercambiar las semillas locales; dar las herramientas para que las personas las usen, multipliquen y distribuyan de forma autónoma; y ser espacio público para intercambiar conocimientos y experiencias.
Para que el proyecto sea viable necesita de una red de guardianas de semillas, que se encarguen de seleccionar, multiplicar y depositar las semillas en la biblioteca para que estén disponibles para su préstamo.
¿Cómo funciona?
Te llevas en préstamo un sobre de veinte semillas, sigues las recomendaciones que encontrarás en una hoja explicativa, inicias la siembra y comienzas el seguimiento del proceso.
Al cabo de un año, y si todo ha ido bien, devuelves a la biblioteca nuevas semillas que, a su vez, volverán a multiplicarse en otras manos. Junto a las nuevas semillas, rellenarás una ficha de devolución con información muy valiosa que nos ayudará a mejorar el servicio.
